Tercera sala de lo penal del blog de boticcario.
Preside la honorable jueza de cuatro años, doña M.C. Boticcario.
La fiscal (o fiscala) acusadora es doña C.C. Boticcario.
Los inculpados: el señor Boticcario y doña B.B Boticcario, a la sazón su señora
Querida hermana, Su Señoria. Queridos padres (por deciros algo). Os he convocado aquí, en este jucio-blog, para esclarecer de una vez para siempre la verdad, sobre el destino de mis... perdón. Nuestros hamsters.
Permitidme, antes de nada, exponer unos sencillos hechos clarificadores que nos permitirán llegar al meollo del asunto con más facilidad.
1. Desde que mi amiga Lola me enseñase su hamster en septiembre del año pasado, nuestro mayor deseo fue el de tener uno cada una en propiedad
2. Desde el principio encontré una actitud abiertamente hostil por parte tuya, papá. No querías ni quisiste tenerlos en casa. Rezongabas cada vez que tenías que limpiarles la caseta. No jugabas con ellos y no les hacías ni caso.
3. Los Reyes Magos, son sabios. Los hamsters fueron el mejor regalo que nos hicieron las pasadas Navidades.
4. Ambos consiguieron escaparse en el pasado, siendo fácilmente localizados al poco tiempo.
Queda una quinta y definitiva cuestión, que me permito el lujo de reservar para el final.
Hasta hace unas semanas, la presencia de mis queridos roedores, no había supuesto ningún trauma para la pacífica convivencia del núcleo familiar, si exceptuamos los dos intentos de fuga y la limpieza de sus habitáculos. Sin embargo, con la llegada del estío y los calores propios de estas fechas, se cambiaron las tornas.
Mamá ¿No es cierto que para que los animales no pasasen calor, decidiste en virtud del poder que detentas en este hogar, moverlos de ubicación y colocarlos en tu baño?. No, no hace falta que contestes. Todos sabemos quien manda en esta casa y quien toma las principales decisiones.
Este cambio de situación, marcó el devenir de los futuros acontecimientos. ¿Por qué?. La respuesta es sencilla. Los roedores pasaron a ser una molestia.
Papá, ¿Es o no es cierto que su actividad nocturna impedía su descanso?¿Es o no es verdad que el hecho de que las pobre criaturas se “ventilasen” medio rollo de papel higiénico cada vez que los colocaban bajo éste no le hacia ninguna gracia?
Por favor, sus disculpas en este sentido están fuera de lugar. Tanto Su Señoría como yo misma hemos sido testigos de su actitud.
Todos esos factores, provocaron los hechos que están siendo juzgados por esta sala.
Mamá, ¿Puedes relatar a este tribunal los sucesos acaecidos el pasado miércoles por la mañana?
Ya lo han oído, la interfecta admite haber sacado a los roedores a disfrutar de un soplo de brisa el día de autos. Sin embargo, en su declaración obviá, que ese día existía alerta por altas temperaturas en la provincia de Madrid. Esas altas temperaturas provocaron un golpe de calor que aniquiló de forma fulminante a los animales como demostraré a continuación.
Papá ¿Podría contarnos que les dijo a sus hijas que había sucedido?
Efectivamente, de su declaración se sobreentiende que mintió con alevosía a sus vástagos, haciéndoles creer que se había producido una nueva fuga de los hamsters, y permitiéndoles concebir falsas expectativas de volver a encontrarlos.
Los hechos si Su Señoría me permite enumerarlos son los siguientes:
Doña B.B Boticcario, sacó a los roedores a las 10:45 am, exponiéndolos a los últimos rayos del sol de primera hora de la mañana. En el transcurso de las dos horas siguientes y pese a que en la zona había sombra desde las 11 am., los desgraciados animales fallecieron victimas de las altas temperaturas y de su reducido tamaño.
El Sr. Boticcario, al llegar a casa y encontrar los cadáveres, actuó de cómplice de su mujer, deshaciéndose de los cuerpos e inventando una coartada para justificar su ausencia.
Mostramos como prueba principal, quinto punto antes reseñado, el diario encontrado en una de las jaulas de los fallecidos:
Miércoles 16 de julio: 10:45 am Mi dueña, en un gesto de bondad, nos saca de nuestra localización habitual y nos coloca la sol para que disfrutemos de la mañana.
11:00 am: ¡jobar! ¡fai un sol dal carallo!
11:10: tengo sed.
11:15: bebo como una posesa, pero no se me quita este calor. Veo a mi hermana igual que yo.
11:20: ¡¡sacadme de aquí!!
11:25: no puedo ni escribir. El calor me derrite las neuronas. Mi hermana yace inconsciente en la jaula de al lado
11:30: lego mis perte ...(ilegible) .... que me recuerden como fui. ...(ilegible) .... una rebelde sin causa. ...(ilegible) .... ios mis niñas!!
Señoria, por eso solicito que los acusados sean condenados por asesinos de roedores.
Eso es todo. Muchas gracias